Literatura / MENTIROSA

MENTIROSA

MENTIROSA

UNA NOVELA DE AMOR DEPLORABLE

WATERS, JOHN

$ 76.000
IVA incluido
Editorial:
CAJA NEGRA EDITORA
Materia
Literatura
ISBN:
978-987-827-206-1

Disponibilidad:

  • Sede TeusaquilloUltimo titulo
  • Sede TabioNo disponible
  • Sede MacarenaUltimo titulo
$ 76.000
IVA incluido
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Marsha Sprinkle es una ladrona de valijas, estafadora experimentada y maestra del disfraz que lleva una vida criminal exitosa en los suburbios de Baltimore. Hasta que un día, tras una serie de eventos desafortunados, el mundo parece decidido a hacerle pagar sus excesos. Ese es el punto de partida de Mentirosa, una road movie literaria sobre la odisea de una antiheroína en busca de venganza y libertad.

Protagonista de una suerte de Bonnie & Clyde sin Clyde (o al menos hasta que un flechazo contaminado de Cupido la enfrenta por fin a un hombre digno en un baño), Marsha atraviesa la Costa Este de los Estados Unidos a bordo de limusinas, buses, aviones, ambulancias y todo medio de locomoción que se le cruce en el camino. Huye de la policía, pero sobre todo de una troupe desquiciada integrada por su hija –Poppy, la joven fundadora de un culto de saltarines fanáticos de las camas elásticas–, su madre –Adora, una excéntrica cirujana estética de mascotas de Nueva York– y su ex cómplice –Daryl, un perdedor heterosexual con un pene gay parlachín– que buscan con ansias asesinarla para erradicar la maldición que ha traído a sus vidas.

Tal como sucedía con su trilogía ensayística (Mis modelos de conducta, Carsick y Consejos de un sabelotodo), el desembarco de Waters en el terreno de la ficción expresa con lucidez su destreza narrativa a través de un bestiario de criaturas enfurecidas y un sinfín de situaciones políticamente incorrectas. Lejos de los relatos de complicidad femenina y maternidades romantizadas, su primera novela (próxima a convertirse en película), escrita con hilarante rebeldía, se centra en una familia totalmente disfuncional y llena de odio que es la consecuencia de un país tan virulento como decadente. Es que Waters sabe más que nadie que la provocación es la mejor de las armas para hacer frente a una realidad cada vez más aburrida y pusilánime.